Gira Ciudad Real 2017
Os vamos a contar la gira de La Revolución Educada de otoño de 2017 por la provincia de Ciudad Real.
Después de llegarme a casa dos enormes cajas con los libros impresos, emocionarme, hacerme a la idea de venderlos y dar salida a muchos de ellos a familiares y amigos, tocaba hacerse la otra idea, la de presentarlo en auditorios y empezar a convertirme en una persona pública.
Empecé a contactar con bibliotecas públicas de las mayores localidades de la provincia de Ciudad Real, y lo presenté allí donde me lo permitieron. Empezamos por la de Ciudad Real, donde tuve mi primera entrevista. A pesar de que en esta biblioteca cuentan con buenos medios de difusión para la convocatoria, nos enteramos de que aquel día coincidieron nada menos que 5 eventos más en la ciudad y que, muy probablemente por ello, asistió poca gente a nuestra presentación. Nosotros nos fuimos igualmente a tomar algo para celebrarlo después del acto.
La siguiente fue la de Manzanares, donde vivo. Aquí, por primera vez me presentaron una concejal, Silvia Cebrián y Juan Miguel Gutiérrez, un colega escritor. Y también por primera vez me sentí bien porque al final del evento se acercó mucha gente para hablar conmigo, saludarme, felicitarme, comprar un libro y, para mi sorpresa, casi todos ellos dedicados. Durante la presentación estuve en mi sitio pero, en este momento final que os comento, me sentí abrumado por la emoción; fue muy fugaz…
En la siguiente, que fue la de Almagro, asistió un grupo de mujeres de un club de lectura y al final, en el turno de preguntas, opinaron exprendo creencias en forma de preguntas tales como: ¿Cómo sería eso posible? Porque yo lo veo muy difícil… Pero sin mostrar un interés auténtico, ya que hablaban en voz muy alta, siempre varias a la vez y sin esperar mi respuesta, de forma caótica y desordenada.
En la de Puertollano no asistió nadie, pero yo igualmente hice mi presentación para mi chica, Joaquinita, en un exceso de profesionalidad, porque quería que viera las correcciones y otras novedades en la presentación. A ella le afectó que no viniera gente, pero a mí apenas porque tenía claro que cumplí con mi obligación.
Proseguimos en Valdepeñas, donde fui con fiebre en uno de los peores resfriados de mi vida. Por primera vez fui entrevistado por varios medios a la vez y me sentí abrumado de nuevo pero, debido a que tengo claro mi discurso, se dio bien. El resultado se puede ver (recomiendo ver al final) en el anterior post. El público fue muy bueno: respetuoso, interesado y participativo. De nuevo, al final me abordó un grupo de personas para charlar y comprar libros. Para mí fue un placer y un gran alivio: creo que la parte que yo más disfruto es la de preguntas finales.
La última localidad fue Alcázar de San Juan. Aquí, por primera vez no tuve pantalla ni proyector, pero siempre fui preparado con un guión específico para no usar apoyo visual. Joaquinita dijo que le gustó más que con pantalla, que fue más ameno. Yo me sentí mejor porque la atención claramente se dirigía a mí: sentía más y mejor al público; fue tan cercano como ir con él de la mano…
Conclusiones y aprendizajes:
- Presentar libros físicamente por localidades no es la mejor forma para dar a conocer una obra de investigación con intención de aportar soluciones y hacerlas populares, pero es necesario hacerlo como servicio público y para ganar experiencia.
- No les debemos importar mucho a ciertos medios de comunicación locales cuando acuden a eventos populares, por frecuentes e irrelevantes que sean, pero no a la revolucionaria, novedosa y apasionada presentación de un libro solucionista.
- Me focalizaré en mi canal de youtube, en crear tutoriales sobre temas concretos que trato en el libro para aportar a la sociedad y darlo a conocer porque pienso que es mejor forma que las presentaciones presenciales.
- Otra forma de darlo a conocer será presentarlo en foros especializados. Primero por internet, y según vea resultados, en persona.
- El desarrollo de un tren de pensamiento conlleva un trabajo ingente: investigación, redacción, estructuración de ideas, supervisiones, maquetación, edición, el esfuerzo económico de publicar y el de vender. Yo me siento pensador, escritor e investigador, y aunque me ha constado sentirme cómodo vendiendo el libro en el que creo, me cuesta considerarme vendedor. Estoy acompañado por un gran equipo, pero me siento desbordado de trabajo.
- Por último, estas dos ideas secundarias: Hay ayuntamientos que te facilitan todo y no tienen que pedir permiso a nadie, y los hay que tienen que pedir supervisión al concejal para saber si censuran o permiten la presentación de un libro, aunque las instalaciones públicas sean de todos y ellos sólo sean gestores.
- “Ella no pudo publicar su libro debido a la piratería” dice una campaña del ministerio de cultura. Los escritores no les importamos a los ministros de cultura. No existe apenas apoyo institucional para editar, publicar y difundir una obra literaria y, aunque lo haya, nos ponen dificultades para acceder a esas facilidades. Personalmente, esa campaña del ministerio me parece una cínica burla y un insulto a nuestra inteligencia.
Gracias a mis compañeros del movimiento, por su retroalimentación académica, por colaborar leyendo y escribiendo reseñas (ver sección Testimonios). A mi corrector Luis Lucena, por su gran servicio de corrección y adecuación; tan profesional… encantador. A mi editor Carlos de Scribo Ediciones, por su claridad, firmeza y flexibilidad; sobrio!
Pero sobre todo, gracias a mis padres, por apoyarme en mi aventura quijotesca y a mi pareja, Joaquinita, por ser parte central de ella, por ser mi presentadora, asesora y primera ayudante en todo así como crítica también en todo.
¡Gracias a todos por este trabajo en equipo que sin vosotros no hubiera sido posible!